16/02/2017 | |

Argentina, una mosca blanca en el mercado mundial de la maquinaria

Más allá de su tamaño, y de arrastrar dos años de bajas, el mercado nacional fue uno de los pocos del mundo donde crecieron las ventas en 2016.

Por Alejandro Rollán

A diferencia de lo que venía ocurriendo en años anteriores, las estadísticas oficiales de venta de maquinaria agrícola en el país durante 2016 se publicaron en forma anticipada.

La fecha de comienzos de marzo se adelantó este año al inicio de febrero para la difusión de un informe que mostró números crecientes, tanto en facturación como en unidades vendidas.

El desempeño de la demanda nacional durante 2016, luego de dos años en baja, se contrapone contra el desenvolvimiento que han mostrado durante el pasado ejercicio la mayoría de los mercados mundiales.

En Europa, la caída en ventas, en especial de tractores y cosechadoras, ha sido generalizada en casi todos los países, al igual que en Brasil, China y Estados Unidos.

La retracción reflejada en los últimos 12 meses por el mercado global viene manifestándose desde hace dos años.

En un período en el cual no solo se ha reducido la demanda, sino que también creció la fabricación de equipos con mayor capacidad de trabajo.

Desde 2013, el mercado de cosechadoras en América del Norte se ha reducido en un 50% y en Europa, un 22%. Otras zonas, como Europa del Este, vienen mostraron un desempeño más estable.

En algunos países, las ventas de equipos usados y la expansión de los servicios ayudaron a reducir la merma en la facturación.

Lejos de detenerse

Se viene un sello nacional para la maquinaria

Será una identificación oficial para aquellas fábricas que produzcan bajo un determinado protocolo de calidad. La medida es analizada en el Ministerio de Agroindustria de la Nación.

Para colmo, los nubarrones lejos estarán de disiparse durante el presente año, al punto que las grandes empresas esperan la recuperación recién a partir de 2018.

Mientras aguardan la llegada de ese momento, la investigación y el desarrollo (I+D) no se detienen. Al contrario, la inversión en este rubro es cada vez mayor. Lo mismo que está sucediendo en Argentina, con la ola de ampliaciones de líneas de producción y de incorporación de tecnología y de nuevos modelos que están haciendo las empresas.

El año pasado, a pesar de haber vendido 5,4% menos a nivel mundial, Claas destinó una inversión récord en I+D, fundamentalmente en nuevos servicios y en el área de tractores y de cosechadoras. Asignó un total de € 214 millones, contra los € 203 millones del año anterior. Como parte de esta estrategia, uno de cada 10 empleados de la compañía europea trabaja en investigación y desarrollo.

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