04/05/2020 | | Tecnología

La siembra y la fertilización exigen una logística renovada

Hay nuevos desarrollos para el abastecimiento de semillas y fertilizantes, tanto en sembradoras y fertilizadoras como en equipos de aeroaplicación.

La siembra y la fertilización son tareas agrícolas que, a través de las máquinas que se utilizan para hacerlas, exigen una logística renovada en su mecanización.

Las ventanas disponibles para la implantación de cultivos y su nutrición con fertilizantes deben ser aprovechadas al máximo y con tiempos mínimos de reabastecimiento.

Las sembradoras de última generación ganaron en autonomía de trabajo mediante la incorporación de tolvas de amplia capacidad.

Las máquinas tipo Air Drill y Air Planter hoy operan, por ejemplo, con 3 tolvas que sumadas hacen un volumen superior a los 7.000 litros.

Los carros tolva que alimentan el trabajo de las sembradoras actualmente ya se ubican en capacidades que van de los 12.000 a los 16.500 litros.

Crecimiento

En el rubro de las fertilizadoras también se suman modelos de mayor productividad a través de tolvas que pueden cargar de 8.000 a 10.000 litros.

Un similar proceso han transitado las incorporadoras que, incluso, pueden aplicar distintos fertilizantes en una misma pasada.

Las estercoleras forman otro segmento en el que se incrementaron las capacidades, con la consiguiente necesidad de contar con equipos para abastecerlas adecuadamente.

Desarrollos

La respuesta a los requerimientos de una logística eficiente se traduce en una serie de innovaciones introducidas en varios tipos de máquinas.

Las tolvas semilleras ya cuentan con versiones que están en el umbral de los 20.000 litros y también lo superan.

Además, se suman compartimentos a fin de transportar semillas y fertilizantes y dejar a punto a una sembradora para iniciar su trabajo.

Expansión

Los tubos de descarga de las tolvas, además incrementar sus diámetros, también ganaron en longitud para llegar a las tolvas de las sembradoras y a las bocas de los carros tolva.

Los picos pivotantes expandieron las posibilidades de trabajar con distintas alturas y despejes.

Otro rubro que creció es el de los guinches específicos para la carga y movimientos de bigbags.

Pueden ser tanto los que se adaptan a las palas frontales acopladas a los tractores, como los guinches-grúa que están en condiciones de reaprovisionar sembradoras, fertilizadoras y aviones que hacen siembra de cobertura.

Las palas frontales en sus diferentes versiones, resultan imprescindibles a fin de manejar las volúmenes de desechos que se cargan en las estercoleras.