24/03/2021 | Ejecutivos | Entrevistas

Hernán Zubeldía: “Redoblamos esfuerzos para el crecimiento de MAGRIBA”

El nuevo presidente de la entidad que nuclea a los fabricantes de maquinaria agrícola bonaerenses define los planes de la entidad y los objetivos trazados para la gestión.

Por Jorge Freites
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Desde fines de 2020, Hernán Zubeldía es el nuevo presidente de MAGRIBA, la asociación que nuclea a los fabricantes de maquinaria agrícola de la Provincia de Buenos Aires.

Con 40 años, no sólo es el titular más joven que haya tenido la entidad, sino que también acredita una extensa trayectoria en el ámbito gremial del sector.

Desde hace más de 15 años, Zubeldía forma parte del Centro Industrial de Carlos Casares, la ciudad bonaerense donde funciona Pulqui, la fábrica de pulverizadoras que encabeza.

MAGRIBA representa la evolución de GAPMA (Grupo Asociativo de Productores de Maquinaria Agrícola), que nació en el ámbito bonaerense con el objetivo de empujar las exportaciones.

En diálogo con Maquinac, Zubeldía define los planes que encara MAGRIBA y los objetivos trazados para el curso de su gestión.

Iniciativas

¿Qué lineamientos tiene en su agenda la nueva Comisión Directiva de MAGRIBA?

Redoblamos esfuerzos para el crecimiento de MAGRIBA.

Estamos sentando las bases de trabajo de una serie de grupos que pensamos armar en esta nueva Comisión.

Nos estamos haciendo eco de la línea de trabajo del gobierno provincial, con lo que fue en su momento el anuncio del “Compre bonaerense”.

¿Qué implica?

Estamos tratando de generar herramientas comerciales y financieras para que las terminales les compremos a los agropartistas de la provincia de Buenos Aires.

Y que también productores y contratistas de la provincia de Buenos Aires tengan incentivos para comprar máquinas fabricadas en territorio bonaerense.

Exportaciones

¿Cuáles son las ideas para fomentar el comercio exterior?

Estamos trabajando con bancos particulares para lograr líneas de prefinanciamiento en materia de exportaciones.

Es un tema complejo porque, por ejemplo, el cliente debe tener una cuenta en el banco que otorga la línea.

Es un tema que lo venimos gestionando hace tiempo y no hay una dinámica de trabajo que sea sostenible en el tiempo.

Cada negocio requiere de un trato particular. Ahora estamos empezando a evaluar algo con Uruguay, pero estamos arrancando.

¿Hay algún modelo asociativo para trabajar en exportaciones?

Cuando en los orígenes empezamos con GAPMA, trabajamos en una línea de proyección asociativa al exterior y nos fue bien en su momento.

Después el grupo se transformó en una cámara, porque empezamos a trabajar en cuestiones de índole de gestión gremial empresarial.

Pero siempre quedó esa llamita prendida y hoy tenemos un equipo que está trabajando en comercio exterior. Ya hicimos algo con Ecuador y la idea es trabajar de manera corporativa.

Hay muchas empresas de Magriba que ya tienen sus mercados y sus distribuidores. También hay diferencias en los perfiles de las empresas. No es lo mismo vender una planta de silo que otro tipo de máquina.

Crecimiento

¿Hay planes tendientes a incorporar nuevos socios?

Sí, en la gestión anterior casi triplicamos la cantidad de socios. La idea nuestra es que la Cámara tiene que ser representativa de su sector.

Hay fábricas que nos gustaría asociar y también agropartistas de la provincia de Buenos Aires. Muchos de ellos son proveedores de las terminales.

¿Cómo trabajan el tema?

Hay un equipo de Magriba que se dedicará a la incorporación de nuevos socios. Uno de los objetivos es identificar los intereses de determinados sectores.

Los intereses de una fábrica no son los mismos que los intereses de un agropartista.

Entonces, queremos tener un abanico de herramientas de trabajo que sirva para todos los sectores que forman parte de la Cámara.

Legislación

Como integrante de CAFMA, MAGRIBA también participa en el proyecto de ley que promueve la entidad para el sector. ¿Qué visión se maneja sobre la iniciativa?

Respecto al proyecto de ley, ponemos énfasis en aclarar un aspecto importante.

No estamos diciendo que no entren máquinas del exterior, sino que se llame a cada cosa como corresponde.

Lo que se fabrica en Argentina que diga “fabricado en Argentina” y lo que no, que esté bien claro que no se fabrica en el país.

Esa falta de definición ¿qué perjuicio provoca?

Las cosas que no están normalizadas, hacen que se generen zonas grises en el medio.

Y esas zonas grises dan lugar a que los recursos que se destinan a financiamiento o reintegros, no sean optimizados y terminen financiando la rentabilidad de empresas en el exterior.

El proyecto de ley va a contribuir a que las divisas no se vayan por el caño grande, en momentos que son tan importantes para el país.