La columna de Alejandro

Por Alejandro Rollán

29/10/2021 |

Microchips, el bien escaso por el que pujan automotrices, maquinaria agrícola y otros

La falta de componentes sigue limitando la producción mundial. Los proveedores aseguran que llevará un par de años normalizar la provisión.

A finales de mayo, el consejero delegado de la empresa Intel, Pat Gelsinger, pronunció una frase en la que advertía sobre la magnitud de la escasez de un producto estratégico: los microchips.

«Aunque la industria ha dado pasos para responder a las limitaciones a corto plazo, todavía puede llevar un par de años que el ecosistema responda a la escasez de capacidad de fundición, sustratos y componentes», aseguró en una intervención virtual en una feria del sector en Taipei.

Ante este escenario, son varios los sectores que han sentido el impacto de este faltante.

Lechería: Un buen momento para invertir en segadoras y rotoenfardadoras

La relación insumo producto es más favorable que un año atrás. Algo similar sucede con la producción de carne.

La maquinaria agrícola es uno de ellos, debido a que son varios los equipos y modelos que ya vienen equipados con multitud de componentes electrónicos, desde los equipos de navegación hasta las cámaras de monitoreo que necesitan microprocesadores para operar.

Lo mismo sucede con la industria automotriz, quizá por su escala la más afectada. Muchas terminales tienen vehículos almacenados sin terminar, a la espera de recibir los microchips necesarios.

Al margen de la producción de maquinaria agrícola y de vehículos 0 km, la pandemia incrementó también la demanda de dispositivos electrónicos.

Es por eso que también pujan por hacerse de stock, en medio de un mercado restrictivo y deficitario, las compañías que fabrican PC.

Según la consultora Moody’s, esta crisis persistirá durante los próximos dos o tres trimestres y podría provocar sólo en la producción mundial de vehículos una retracción de entre el 1 y 2 % este año.

Empleo: El déficit que reveló Toyota también lo padece la maquinaria agrícola

La falta de personal calificado comienza a ser una limitante para las empresas del sector,  que se encuentran trabajando a full y requieren de más fuerza laboral.

Son varias las automotrices, inclusive algunas las que operan en el país, que han decidido interrumpir durante un período tiempo la producción debido a la falta de estos componentes.

En Europa, las fábricas de tractores y de cosechadoras advierten sobre la falta de suministro de estos componentes.

Si bien en el primer semestre del año las ventas de tractores agrícolas crecieron 25% (un total de 89.060 unidades según las cifras de la cámara de fabricantes de la Unión Europea), la comparación es contra el inicio de la pandemia.

Para los fabricantes, las restricciones de producción y distribución de Covid-19 mejoraron gradualmente en 2021, pero están lejos de volver a la normalidad.

Aseguran que siguen existiendo importantes desafíos en la cadena de suministro, y que la falta de microcomponentes es un problema con el cual deberán convivir en el mediano plazo.

Columnas anteriores

Biodiésel: Primeras señales para desregular el mercado nacional

Maquinaria agrícola: ¿Cómo cierran el año los principales mercados del mundo?

La maquinaria agrícola en la era Milei: ¿Cómo queda el comercio exterior?

Maquinaria agrícola: ¿Cuántos trabajadores hay en las fábricas, en las concesionarias y en el transporte‽

Aparecieron las lluvias y las sembradoras clavaron un récord