La columna de Alejandro

Por Alejandro Rollán

25/11/2021 |

Inversiones en maquinaria: La pulseada entre los precios de los granos y los costos

Si bien se proyectan cotizaciones por encima de los valores promedios, la inflación mundial encarece la producción industrial y en el comercio exterior.

Mientras la cosecha 2021/2022 de soja y de maíz en Estados Unidos, principal mercado de referencia para los precios de ambos granos, llega a su fin, el balance entre oferta y demanda mundial ofrece números nunca vistos hasta ahora.

Con producciones y necesidades de consumo en niveles récord para el cereal y la oleaginosa, a lo que se suma también el trigo, no se esperan cambios significativos en las cotizaciones internacionales.

El Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA) proyecta para la campaña 2021/2022 cosechas históricas a nivel mundial para los tres granos:

  • 384 millones de toneladas para la soja,
  • 1.204,6 millones de toneladas para el maíz y
  • 775 millones de toneladas para el trigo.

A pesar de estas magnitudes, si bien los precios no tendrán mucho margen para crecer, tampoco lo tendrán para bajar.

Los analistas aseguran que continuarán por encima de los valores históricos.

La fortaleza de las cotizaciones, no obstante, podría verse afectada por la suba de los costos internacionales, que afectan la producción agropecuaria, industrial y el comercio exterior.

En esta puja, entre ingresos y gastos, el resultado sería un menor poder de compra de las materias primas.

Variables en juego

En lo que respecta al costo de los fletes marítimos para el traslado de componentes y equipos, un informe de la Naciones Unidas proyecta que el año próximo las importaciones podrían encarecerse un 11%.

¿La razón? La imposibilidad de la industria vinculada con la logística de recuperarse a los niveles de prepandemia.

Además, las restricciones sanitarias impuestas por algunos países, de alto perfil industrial como por ejemplo Alemania, China y el sudeste asiático, debido a rebrotes de COVID-19 también generan incertidumbre.

La escasez de fertilizantes y de fitosanitarios, que a nivel global se podría extender hasta el arranque de la precampaña de trigo 2022/2023  a nivel nacional, también impacta en los márgenes agrícolas esperados.

Además del atraso cambiario y de la inflación doméstica, el alza generalizado de precios a nivel mundial es también fundamento que erosiona el poder de compra de los granos.

Alemania cerrará el año con el mayor indicador desde la época de la reunificación: alrededor de 4,6%. Mientras que en Estados Unidos la suba interanual es del 6,2%, la mayor en 30 años.

Los economistas del Banco Central Europea ajustaron el índice general de precios dentro del bloque y lo proyectan en 2,1% para este año; 1,7% para 2022 y 1,5% para 2023.

A partir de este contexto de márgenes más reducidos, por suba de costos e ingresos estables, quedará por dilucidar su impacto en la inversión.

La maquinaria agrícola nacional transitó durante los últimos tres meses con un buen ritmo de ventas, producción y de empleo.

De acuerdo con los datos de septiembre, octubre y lo que va de noviembre relevados en el Informe de Panorama Productivo del Centro de Estudios para la Producción (CEP-XXI), que depende del Ministerio de Desarrollo Productivo, la industria del sector está teniendo el mejor año del siglo XXI, con una proyección que ubica a la fabricación de tractores con el mejor desempeño desde 1986.

En cuanto a mano de obra, la industria tiene el mayor nivel desde 2013. La gran pregunta es si durante el año próximo podrá mantener este desenvolvimiento.

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