30/09/2022 | | Tecnología

Máquinas para silobolsa: El boom que cumple 20 años

Comenzó como un refugio de valor en los campos. En poco tiempo, la tecnología de origen nacional se extendió en el mundo.

Las embolsadoras y extractoras, máquinas creadas para trabajar con el silobolsa, constituyen un boom que cumple 20 años.

Son máquinas concebidas por la necesidad y la urgencia que derivaron de la crisis económica padecida por Argentina desde 2001.

En sus orígenes confluyen dos factores. Por un lado, la debacle del sistema financiero que tuvo en la desaparición de los depósitos en dólares a su expresión más fuerte.

Por ninguna mente cruzaba, en esos tiempos, la idea de llevar el dinero a un banco.

Por otra parte, estaba el salto de la soja como commoditie de ascendente cotización mundial y su arrollador protagonismo en el agro argentino.

Desde 2002, el precio de la soja inició una escalada que, al menos hasta 2006/07, se situó en un promedio anual de U$S 100 por tonelada.

Cada año, en ese período, la soja valía cada vez más y el campo argentino aumentaba en cada campaña la producción de la oleaginosa.

Almacenaje

En un contexto comandado por la consigna “a guardar la soja” como refugio de valor porque nadie quería acercarse a un banco, el silobolsa emergió como la tabla de salvación.

Era un recurso de rápida instalación (en contraste con las estructuras convencionales de silos que demandan tiempo de construcción) y de bajo costo.

Almacenar en el silo bolsa requería de una máquina que recibiera los granos de la tolva y los enviara al interior del plástico.

Después hacía falta otro equipo que se encargara de extraer la producción cuando llegaba el momento de la venta (o de alimentar animales).

Explosión

Entre 2002 y 2003, la industria nacional de máquinas agrícolas vivió el brote desbordante de empresas subidas a la ola de embolsadoras y extractoras.

Desde firmas tradicionales y de envergadura que desembarcaban en el segmento, hasta pymes metalúrgicas que aprovechaban la oportunidad, el aporte de novedades inundó el mercado.

La tecnología demostró en pocas campañas que no era la solución pasajera para problemas serios.

Estaba en condiciones de convertirse en un eslabón permanente de la cadena agrícola y así permanece hasta la actualidad.

Internacional

Las embolsadoras y extractoras no sólo triunfaron en Argentina como compañeras del silobolsa.

Se convirtieron en productos de exportación y en motores de una creación tecnológica nacional que se abrió espacio en todos los continentes.

Hoy en día, las exportaciones de equipos para embolsar y extraer granos llegan a clientes de lugares como Australia, Nigeria, Rusia, Colombia, Francia, Estados Unidos, Canadá, Rumania y Ucrania, entre otros países.

Incluso, hay empresas que desarrollaron modelos de embolsadoras y extractoras específicos para el exterior.

Ocurre que en otros destinos, las bolsas más utilizadas para el embolsado de producción granaria son de 10 pies, mientras en Argentina predomina el almacenamiento en bolsas de 9 pies.

Noticias

[VIDEO] Tristar: La atomizadora triple

[VIDEO] Trackzilla: El manipulador telescópico más grande del mundo

[VIDEO] El camión trasportador de megafardos de Fliegl

[VIDEO] VAX: La «joya» robotizada de Metalfor