Jorge Olmedo, CEO de La Fayuca, comentó durante el Congreso CREA 2022 los logros de su empresa al implementar tecnología y llegar a un sistema de ordeñe voluntario, y cuál es el rol que tiene “Arturito” en el proceso.

DeLaval, la multinacional especializada en mejorar la producción lechera, comercializa en el país los equipos autónomos OptiDuo, encargados de mezclar y acercar la comida a las vacas.

“Arturito es un arrimador de comida, trabaja con batería y tiene una estación estática donde se carga”, detalló Olmedo en diálogo con Maquinac.

“Lo programamos para que cada tanto tiempo salga y arrime la comida con un tornillo Arquímedes, de esta forma va batiendo la comida. Gracias a esto, la comida se mantiene fresca y evita que las vacas seleccionen”, agregó.

“Los empleados están felices, ya que esta tarea es muy tediosa y difícil, sumado a que no es arrimarla únicamente, sino que el robot mezcla. Nosotros damos de comer 2 veces al día y tratamos que haya mucho volumen en los bocados, el empleado tendría que ir y venir por todo el galpón a lo largo”, añade.

Al hablar de ventajas económicas, Olmedo comentó: “el silo y granos son el 50% de la estructura de costos en el tambo, entonces cualquier elemento que mejore la conversión o el consumo tiene un repago bastante bueno”.

A futuro

Olmedo aseguró estar abierto a incorporar máquinas agrícolas autónomas que “resuelvan las cosas”.

“La tecnología no desplaza a nadie, las personas hacen otras cosas. Las empleados hacen cosas que tendríamos que hacer nosotros, pero no llegamos por el tiempo. Así que están más atentos a las vacas, dándole confort y ocupándose de las alarmas”, concluye Jorge Olmedo.

Crecimiento

Olmedo afirma que hay 220 tambos robotizados en Argentina, con varios proyectos más en marcha. Cada vez se incorporan más sensores, robots y procesos innovadores.

A su vez, desde la firma ya han detectado vacas que producen más de 60 litros diarios.