20/01/2023 | | Tecnología

La automatización que engorda la ganadería

En el mercado argentino prosperan los dispositivos que facilitan el acceso directo de los animales a la alimentación.

La automatización en el suministro de comida, tanto para el ganado de carne como de leche, proporciona una serie de ventajas.

Nuevos comederos, desmenuzado de reservas forrajeras y alimentadores inteligentes van llenando los casilleros en la nutrición animal.

Son productos que mejoran la calidad de la producción y el estado de bienestar del ganado.

Además, reducen el error humano en la alimentación, por lo que los animales siempre tienen garantizados los nutrientes que necesitan.

Y también permiten al productor reducir los desperdicios, las cargas de trabajo y el consumo de combustibles, con beneficios para la sostenibilidad de la producción.

Con la automatización del racionamiento, el resultado es una mejora significativa en las condiciones de salud del ganado.

Tendencia

Lo que ocurre en Argentina sintoniza con los parámetros que se observan en otros países de importancia en la producción ganadera.

Se está poniendo el foco en las nuevas tecnologías para establos de última generación donde el bienestar animal, condición cada vez más demandada por el consumidor final, va de la mano con la reducción de los costos de producción.

Actualmente, existen sistemas que aportan una gran precisión en el análisis, mezclado y pesaje de la ración.

Así se eliminan todas aquellas ineficiencias y errores que afectan a los animales, que no reciben todos los nutrientes que necesitan.

Beneficios

La posibilidad de dividir las raciones en muchas porciones pequeñas también es un beneficio adicional para el ganado, que siempre tiene alimento fresco a su disposición.

Estos sistemas de automatización de alta tecnología también permiten medir la uniformidad del forraje y la longitud de las fibras que lo componen.

Una vez capacitado, el productor puede operarlos con gran facilidad, programando tiempos de racionamiento a alta frecuencia.

De esta forma interviene el operario, pero gran parte del trabajo lo realiza la máquina.

También fruto de la última tecnología, los pequeños robots se convierten en sistemas de distribución de alimento, que además comprueban dónde ya ha comido el animal, para asegurarse de que dispone de la mayor cantidad de ingredientes frescos posible.