05/04/2023 | | Empresas

Dolbi trabaja en una nueva fase de expansión

Elbio Dolzani, Presidente, y Mauro Bianchi, Responsable de Comercio Exterior, analizan el progreso de la empresa en el mercado interno y su inserción internacional.

Dolbi trabaja en una nueva fase de expansión que se orienta hacia el mercado nacional y también a las posibilidades que se abren en el mundo.

La empresa con sede en Avellaneda (Santa Fe) exhibe una particularidad dentro del negocio argentino de máquinas agrícolas.

Se ha ganado un lugar en mercados internacionales trabajando en el nicho de máquinas para algodón y, por otra parte, se ha consolidado, en Argentina, en rubros más tradicionales como las sembradoras y los equipos de labranza.

Así, Dolbi se mueve con varios frentes para atacar en productos y también en lo que respecta a la evolución de su infraestructura industrial.

Estrategias

En el plano interno, Dolbi viene haciendo una fuerte apuesta en el negocio de las sembradoras.

“Actualmente, del 50% al 60% de nuestra facturación proviene de las sembradoras de granos gruesos”, explica Elbio Dolzani, Presidente de la empresa.

“Después siguen, en orden de importancia, los equipos de algodón, principalmente cosechadoras y rotoenfardadoras y después se ubica la línea de subsoladores y rolos”, agrega.

“De esta manera, tenemos un abanico de productos bastante importante para estar en todas las zonas del país”, destaca Dolzani.

Variantes

Dentro de su apuesta a las sembradoras, Dolbi también evoluciona en tecnologías para la siembra de calidad.

“Nuestra sembradora AX4200 ahora está equipada con lo último en tecnología respecto a dosificación, precisión, presiones neumáticas e hidráulicas, monitores con variadores de velocidad para hacer dosis variable y otras posibilidades”, subraya Dolzani.

“A la AX4200 la denominamos una sembradora de múltiples opciones y múltiples configuraciones”, añade.

“Tiene una estructura básica, pero el cliente termina definiendo, por ejemplo, qué tipo de dosificación prefiere”, expresa Dolzani.

“Por eso, hemos desarrollado el cuerpo de siembra para que se adapte a las distintas variantes de dosificación porque ya no se vende con presión por resortes”, agrega.

“Hoy ofrecemos los dosificadores ecuRow, Selenium, MaterMacc y después también otras opciones que se pueden adaptar”, puntualiza Dolzani.

“Si a un productor le sale muy cara la tecnología surco por surco, puede tener el corte por sección, por ejemplo cada seis cuerpos. Tenemos máquinas, también, que están trabajando así”, agrega.

Por otra parte, Dolbi renovó la sembradora Air drill AD 3000 en ciertas cuestiones estéticas y de prestaciones.

Asimismo, trabaja en una sembradora multipropósito, que está testeando con productores, para hacer granos finos y gruesos.

Exportaciones

Mientras Dolbi pone fichas en el mercado interno, también enfoca sus esfuerzos en robustecer la presencia en los mercados externos.

En ese camino se encuentra la cosechadora de algodón autopropulsada HAC 5000.

“Es una máquina que está en un proceso de expansión, porque todavía se encuentra en baja escala de producción”, explica Mauro Bianchi, Responsable de Comercio Exterior de la empresa.

“Por ahora son unidades puntuales; vamos a ir paso a paso, ya que es un producto complejo al ser automotriz, y requiere de asistencia de fábrica y en el país a donde se exporta”, agrega.

“Por ahora, la cosechadora HAC 5000 se exportó a Sudán, está trabajando bien y tenemos expectativas”, dice Bianchi.

“Los objetivos de 2023 en comercio exterior consisten en seguir afianzándonos en los mercados en los que estamos y vamos haciendo punta con productos para algodón, especialmente cosechadoras y rotoenfardadoras”, añade.

La empresa participó de un congreso internacional sobre algodón en Egipto y continúa trabajando con sus equipos algodoneros en países de África.

“Nuestro principal mercado es Sudán, donde hay cerca de 80 cosechadoras Javiyú trabajando”, expresa Bianchi.

Además, la empresa ha colocado sus productos en Sudáfrica, Paraguay y Uruguay.

“Actualmente, el tipo de cambio oficial no nos favorece. Tuvimos que incrementar el precio de nuestros productos en dólares, lo que nos quita competitividad”, analiza Bianchi.

Expansión

En cuanto a infraestructura industrial, Dolbi culminó un proceso de ampliaciones que llevó a la fábrica a una superficie de 15.100 m2.

También sumó recursos tecnológicos para producir, como corte láser, soldadura y una plegadora de última generación.

“Adecuamos la planta en muchas cosas y trabajamos mucho en la línea de montaje, haciendo foco en incorporar tecnología”, destaca Elbio Dolzani.

Otro proyecto en marcha es concentrar las oficinas de los distintos sectores en un solo lugar a fin de coordinar las actividades.

Además, Dolbi encara acciones para mejorar el ambiente de trabajo, porque en el norte santafesino el calor tiene un impacto fuerte en las instalaciones.

En una primera etapa, se incorporaron climatizadores internos y ahora la empresa está pensando en sistemas aislantes que eviten las altas temperaturas.