La ola global de la electrificación no se limita a las camionetas y los tractores. Incluso los utilitarios agrícolas también van sumando opciones con propulsión libre de emisiones.

Se trata de versiones eléctricas, generalmente utilizadas para transporte y tareas de menor escala en agricultura y ganadería.

Un ejemplo ilustrativo de esta tendencia lo aporta la compañía francesa Schot-Mob con su modelo Cargo 500, homologado para trabajar en el campo.

Se trata de un utilitario agrícola eléctrico que puede alcanzar una velocidad de 45 Km/hora y tiene una autonomía de hasta 80 kilómetros.

El Cargo 500 cuenta con una caja volcadora de 350 Kilos de capacidad y barandas laterales plegables, por lo que ofrece amplia funcionalidad.

El equipo se puede recargar en cualquier toma eléctrica. Completar las cinco baterías demanda unas 8 horas.