Las entidades que agrupan a los fabricantes nacionales de maquinaria agrícola salieron a advertir sobre lal consecuencias negativas de la habilitación irrestricta para importar equipos usados.

Uno de los pronunciamientos partió de la Asociación de Fabricantes de Maquinaria Agrícola y Agrocomponentes de Córdoba (AFAMAC).

La medida “pone en riesgo toda la cadena de valor del sector, que viene trabajando desde hace años con un producto competitivo”, advirtió Gustavo Piccioni, Presidente de AFAMAC.

“La industria local no puede competir en precio por las deficiencias estructurales de nuestro país”, agreg{o

Gustavo Piccioni

Para Piccioni, el problema no reside en la capacidad tecnológica del sector nacional, sino en las condiciones macroeconómicas.

“Argentina se destaca en toda la cadena de valor del agro, desde el productor hasta el fabricante de maquinaria, pero hoy lo que no tenemos es precio”, subrayó.

“Y eso se debe a los costos internos, impuestos, cargas laborales e infraestructura deficiente”, explicó.

Trabajo

Enrique Bertini

Por su parte, Enrique Bertini, titular de la Cámara Argentina Fabricantes de Maquinaria Agrícola (CAFMA), dijo que “el gobierno claramente le da la espalda a la industria».

Sobre los efectos del Decreto 273/25 que habilitó el ingreso de productos usados, Bertini hizo hincapié en el tejido socio-económico del interior del país.

«La fuerza laboral está distribuida en pequeños proveedores con los talleres de los pueblos. Ahí sí se va a notar la falta de trabajo», remarcó.

Maniobras

También advirtió Bertini que el régimen le abre la puerta a una gran cantidad de competidores que pueden vender en el país a un «precio muy bajo, casi de chatarra».

Y previno, asimismo, sobre que el decreto que eliminó el Certificado de Importación de Bienes Usados (CIBU) es «terriblemente laxo».

Como ejemplo, expuso que un productor puede comprar una máquina nueva y hacerla figurar como usada o reparada para pagar el 35% del arancel que le correspondería.