En el mundo se conocen las fertilizadoras/sembradoras neumáticas para hacer aplicaciones de nutrientes y distribuir semillas.

Son máquinas versátiles que están en condiciones de cubrir esas funciones, tanto para agricultura como para implantar pasturas en ganadería.

Pero son puntuales los casos en que se diseña específicamente una máquina autopropulsada para hacer cultivos de cobertura.

Tal vez uno de los ejemplos más emblemáticos en el orden internacional sea el modelo Fortifier, desarrollafo por las empresas norteamericanas Hagie y MonTag (Montag Manufacturing).

Sinergia

Para el trabajo conjunto, MonTag aportó su experiencia en productos para fertilización, particularmente las tolvas que operan detrás de las sembradoras.

A su vez, Hagie, especialista en pulverizadoras, puso a disposición sus conocimientos en el armado de estructuras de máquinas autopropulsadas.

El resultado es un equipo que dispone de dos tanques de acero inoxidable, de 2.200 litros cada uno, lo que reporta una capacidad total de 4.400 litros.

Se complementa con un barral delantero de 36 metros, dividido en cuatro secciones, controladas con motores hidráulicos y válvulas PWM.

Por supuesto, además del objetivo de los cultivos de cobertura, la máquina Fortifier se puede adaptar a la aplicación de fertilizantes en líneas.