India no se cansa de dejar sin aliento a los observadores del negocio de máquinas agrícolas con los números que mueve en tractores.

No sólo asombra en el presente, sino que promete hacerlo aún más en el futuro cercano.

Ahora se espera que alcance una facturación de U$S 11.900 millones en 2028, a través de la combinación de varios factores.

De acuerdo con un análisis presentado por la consultora por IMARC Group, el mercado indio seguirá su marcha arrolladora.

A partir de los U$S 7.700 millones que registró en 2022, en apenas cinco años más podría crecer un 54%, según IMARC Group.

Causas

El optimismo sobre el futuro de los tractores en India se alimenta con el proceso de mecanización de la agricultura que requerirá cada vez más equipos.

También hacen su aporte las iniciativas y políticas proactivas del gobierno indio destinadas a apoyar al sector agrícola.

Los subsidios, los incentivos financieros y las facilidades de préstamo accesibles han hecho que los tractores sean más asequibles y han contribuido al crecimiento general de la industria agrícola.

También existe una evolución de tractores con bajo nivel tecnológico a otro estrato con mayores prestaciones y ecológicamente eficientes.

Escala

Por otra parte, el mercado indio está presenciando un aumento de la agricultura a pequeña escala, lo que lleva a una mayor demanda de tractores compactos.

Los equipos ágiles y versátiles satisfacen las necesidades específicas de los pequeños productores, ofreciendo maniobrabilidad.

Como efecto colateral, está creciendo el negocio de repuestos y servicios para tractores, lo que representa oportunidades para las empresas que operan en el sector.