La Unión Europea (UE), como bloque económico, es el mayor mercado de la maquinaria agrícola a nivel mundial.

El nivel de actividad de sus 7.000 fabricantes radicados en un territorio que abarca 27 países (incluyendo el Reino Unido) generan ventas anuales que rondan los U$S 40.000 millones, representando casi 30% del comercio internacional.

Debido a su protagonismo, la evolución de sus indicadores se ha convertido en un termómetro para monitorear a nivel global el desempeño del sector.

Luego de que se encendieran las alarmas en julio pasado, cuando el índice general de clima empresarial que elabora la Asociación Europea de Fabricantes de Maquinaria Agrícola (CEMA) mostró la primera caída desde la crisis provocada por el COVID-19, en septiembre se perforó ese piso.

En una escala de medición del indicador de -100 a +100 puntos, el dato durante el presente mes se ubicó en -31 puntos.

A juzgar por el panorama que proyectan las empresas en el corto plazo, las chances de revertir la tendencia no se observan.

El 58% de las empresas encuestadas para la confección del índice espera que su facturación disminuya en los próximos seis meses. Y un 71% proyecta una nueva caída en la entrada de pedidos. 

El clima empresarial es de recesión, aseguran desde las fábricas.

Según la cámara europea, el deterioro afecta también a los fabricantes de componentes, que se habían mostrado más optimistas en los meses anteriores, pero que se han visto obligados a corregir de manera drástica sus expectativas, haciéndolas negativas.

Según los encuestados, las necesidades de inversión por parte de los productores parecen haberse agotado en todos los mercados europeos. 

A tal punto que no hay un solo país del bloque en el cual la mayoría de los participantes en la encuesta tuviera expectativas positivas de facturación. 

A pesar del freno en los últimos meses, los fabricantes confían en que 2023 pueda reportar aún, al cabo de sus 12 meses, un ligero aumento en el volumen promedio de negocios, a partir del alto volumen de ventas a principios de año.

En 2022, el mercado de tractores agrícola en Europa alcanzó las 165.200 unidades registradas.

Significó una caída de -8,7% en comparación con 2021, que fue el mejor año de ventas en mucho tiempo.

Si bien durante el año pasado, la cantidad de maquinaria registrada por mes fue menor al del año anterior, en casi todos los meses las matriculaciones estuvieron cercanas o superiores al promedio de los últimos tres años.

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