La columna de Alejandro

Por Alejandro Rollán

19/10/2023 | Opinión

Tractores y cosechadoras: Sí a la digitalización, pero también a la mayor potencia

La agricultura digital es parte del nuevo paradigma de la industria, pero las marcas líderes siguen trabajando en expandir los límites en tamaño y capacidad de trabajo.

El arranque del Siglo ha sido próspero para el desarrollo de la Agricultura Digital en la maquinaria agrícola.

La marcas globales enarbolaron esa bandera que se sustenta en cuatro pilares: La conectividad, para la obtención y la trasmisión de datos; la Inteligencia Artificial, que les permite a las cosechadoras aprender de sí mismas; la autonomía, con tractores supervisados a campo; y la electrificación, con el desarrollo de equipos híbridos que aportan menor consumo y mayor eficiencia.

La tendencia, según los modelos de investigación y desarrollo (I+D), apunta a que, por ejemplo, los primeros vehículos autónomos en su totalidad estén disponibles en 2025.

Sin embargo, las empresas no descuidan lo que es un principio básico en los tractores y cosechadoras: La mayor potencia y capacidad de trabajo.

Es por ello que las marcas que comandan la era de la digitalización tampoco descuidan el tamaño y el rendimiento.

En vísperas de una nueva edición de Agritechnica 2023 (12 al 18 de noviembre – Hannover, Alemania), la exposición de referencia mundial para la maquinaria agrícola, New Holland se quedó con la única Medalla de Oro que entregó la edición.

Fue por su concepto general de la cosechadora de doble rotor axial CR, que mejora el rendimiento en el proceso de trilla, que se realiza mediante dos rotores axiales, manteniendo las dimensiones de las máquinas actuales y el peso por eje.

La mayor potencia en tractores y en cosechadoras totalmente eléctricas e hidráulicas, asistidas por uno o dos motores diésel y equipadas con tolvas cada vez más grandes con la finalidad de recolectar la mayor cantidad de hectáreas serán parte de la tendencia de corto plazo.

En tractores de Alta Potencia, las grandes empresas comienzan a mostrar sus cartas, que son cada vez más fuertes.

John Deere prepara un tractor articulado de más de 700 CV, montado sobre un chasis articulado y traccionado por orugas.

Desde 2020, la marca del ciervo trabaja en el desarrollo del motor de 18.000 cc y 882 CV.

La alemana Claas tampoco descuida el mundo de los gigantes, por eso su flamante Serie 12 de tractores Xerion incluye un modelo de 653 CV.

Case IH dejó insinuar la silueta de su Quadtrac 715, un tractor que incorporará un motor capaz de desarrollar 778 CV de potencia máxima.

La industria tiene claro que la Agricultura Digital, fundada en el concepto de ofrecer soluciones tecnológicas que van más allá de la maquinaria propiamente dicha, es parte del nuevo paradigma.

Pero nadie se atreve a desterrar el principio fundacional que tienen los “fierros”, que es la potencia y la capacidad.

Por eso las empresas siguen trabajando en expandir sus límites.

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